La selección mexicana inició el encuentro con dominio y buen ritmo ofensivo, generando las primeras oportunidades de peligro en el área rival.
Sin embargo, la férrea defensa surcoreana se encargó de frenar los ataques tricolores con varias faltas tácticas que detuvieron el ímpetu de los dirigidos por Carlos Cariño.
A pesar del control del balón, México se vio sorprendido cuando Hyeon-bin Koo abrió el marcador al minuto 19 tras un rebote en un tiro de esquina.
Lejos de rendirse, el conjunto mexicano se volcó al ataque y empezó a inquietar la portería defendida por Do-hun Park.
Para la segunda mitad, México adelantó sus líneas en busca de la remontada, pero una mala salida del portero Santiago López permitió a Nam Ian aprovechar la ocasión y poner nuevamente en ventaja a Corea del Sur al minuto 48. El tanto cayó como un balde de agua fría y cambió el rumbo del encuentro.
A pesar de los esfuerzos del equipo nacional por igualar el marcador, la selección asiática se mantuvo firme en defensa y mostró una gran eficacia para conservar el resultado.
