Menu

Jardinería y tradición en la vida cotidiana

2 semanas atrás

En el municipio de Ciénega de Flores, un usuario recurrió a un grupo de ventas para promocionar sus servicios de jardinería, ofreciendo poda de árboles y arbustos, corte de zacate, deshierbe y control de plagas.

El anuncio, acompañado de la frase “servicio garantizado” y una invitación a cotizar sin compromiso, llamó la atención de los habitantes de la zona que suelen buscar oficios locales para el mantenimiento de sus hogares.

Una práctica con siglos de historia

Aunque la publicación fue sencilla, remite a una actividad con amplio valor cultural.

La jardinería, entendida como el proceso de cultivar plantas por estética, alimento o disfrute, tiene registros desde la Edad Media. Documentos históricos señalan que el término “jardín” proviene del latín hortus gardinus, que hacía referencia a espacios protegidos o cercados para resguardar plantas de animales o ladrones.

Entre estética, técnica y tradición

A lo largo del tiempo, la jardinería no solo se ha vinculado con el embellecimiento de espacios, sino también con expresiones artísticas y, en algunos casos, con símbolos de estatus social.

Obras como la Teoría y Práctica de la Jardinería (1709) y tratados agrícolas del siglo XVI ya describían técnicas, herramientas y criterios para el cuidado meticuloso de hierbas, flores, frutos y árboles.

El oficio del jardinero y su evolución

Para los especialistas, la jardinería se ha mantenido como una actividad accesible, basada en herramientas manuales como palas, rastrillos, regaderas o carretillas.

A diferencia de la agricultura o la horticultura, que dependen de maquinaria y sistemas industriales, el trabajo del jardinero conserva una esencia más artesanal, centrada en el cuidado personal de los espacios verdes.

Jardinería y horticultura: diferencias y similitudes

Aunque ambos conceptos suelen confundirse, los expertos explican que la jardinería tiene un carácter más recreativo o complementario, mientras que la horticultura implica la producción profesional de hortalizas, frutas o flores a una escala mayor.

Sin embargo, en mercados locales es frecuente que pequeños productores —también llamados “jardineros”— vendan directamente lo que cultivan en sus huertos.

Una actividad que mantiene su papel en la vida diaria

Hoy en día, y pese a los avances tecnológicos, la jardinería sigue considerándose una forma de conexión con la naturaleza y un oficio esencial para conservar áreas verdes.

Desde espacios domésticos hasta parques urbanos, la figura del jardinero continúa siendo indispensable, tal como lo demuestra la oferta de servicios en comunidades como Ciénega de Flores, donde la demanda por mantener jardines saludables se mantiene constante.